El gas natural es una fuente de energía cada vez más utilizada en todo el mundo. Pero, ¿alguna vez te has preguntado de dónde proviene este recurso? El gas natural se forma a partir de la descomposición de materia orgánica que se encuentra en el subsuelo de la Tierra. Durante millones de años, la materia orgánica se ha ido acumulando en capas sedimentarias y, gracias a la presión y la temperatura, ha generado el gas natural que utilizamos hoy en día. En este artículo te contaremos más detalles sobre el origen de este valioso recurso.
Formación geológica del gas natural
El gas natural se forma a partir de materia orgánica que se acumula en capas de sedimentos en el fondo del mar y en tierra firme. Con el tiempo, la materia orgánica se descompone y se convierte en hidrocarburos, que incluyen gas natural, petróleo y carbón.
Para que el gas natural se forme, se requieren ciertas condiciones geológicas específicas:
- Una fuente de materia orgánica, como restos de plantas y animales.
- Una capa de roca impermeable que impida que el gas escape hacia la superficie.
- Una capa de roca permeable que permita que el gas se acumule.
- Un proceso de entierro y compresión que convierta la materia orgánica en hidrocarburos.
Una vez que se formó el gas natural, puede migrar hacia la superficie a través de capas permeables de roca y acumularse en reservorios subterráneos. Estos reservorios pueden estar ubicados en formaciones geológicas como arenas, calizas y lutitas.
Es importante destacar que el proceso de formación del gas natural puede llevar millones de años y su extracción debe ser cuidadosamente estudiada para evitar daños al medio ambiente.
Procesos de generación de gas natural
Gas natural es un combustible fósil que se encuentra en yacimientos subterráneos. Su origen se remonta a la descomposición de materia orgánica en condiciones especiales de temperatura y presión.
El proceso de generación del gas natural se da en tres etapas:
1. Acumulación de materia orgánica: restos de plantas y animales se acumulan en sedimentos y se cubren con capas de roca y tierra.
2. Transformación en materia fósil: la materia orgánica se somete a altas temperaturas y presiones, lo que la convierte en materia fósil, como petróleo o gas natural.
3. Generación de gas natural: el gas natural se forma cuando la materia fósil es sometida a altas temperaturas y presiones adicionales, lo que causa la liberación de gases como metano, etano y propano.
Los yacimientos de gas natural se encuentran en capas subterráneas de roca porosa, donde el gas se acumula en espacios entre las rocas. Los gases son extraídos mediante perforaciones en la tierra y se transportan a través de tuberías para su uso como combustible.
Fuentes de gas natural a nivel mundial
Existen diversas fuentes de gas natural en todo el mundo, las cuales se pueden clasificar en dos categorías principales: convencionales y no convencionales.
Fuentes convencionales de gas natural:
- Yacimientos asociados al petróleo: gran parte del gas natural se encuentra en yacimientos de petróleo, donde se produce de forma natural junto con el crudo.
- Yacimientos de gas independientes: se encuentran en capas de roca porosa y permeable en la tierra, y su extracción se realiza a través de pozos.
Fuentes no convencionales de gas natural:
- Gas de esquisto: se encuentra atrapado en capas de roca sedimentaria de baja permeabilidad, y su extracción se realiza a través de la técnica de fracturación hidráulica o fracking.
- Gas de carbón: se encuentra atrapado en capas de carbón subterráneo, y su extracción también se realiza a través de la técnica de fracking.
- Gas de biogás: se produce a partir de la descomposición de materia orgánica en vertederos, aguas residuales y otros residuos orgánicos.
Tecnologías para la extracción de gas natural
Existen diferentes tecnologías utilizadas para la extracción de gas natural, y la elección de una u otra dependerá de las características geológicas del yacimiento. A continuación, se describen algunas de las más comunes:
Perforación convencional: se realiza mediante la perforación de un pozo vertical en la superficie terrestre hasta alcanzar la formación geológica que contiene el gas natural. A través de este pozo, se extrae el gas natural y se lo lleva a la superficie mediante un sistema de tuberías.
Fracturamiento hidráulico: se utiliza cuando la roca que contiene el gas natural es poco permeable y no permite que el gas fluya hacia la superficie a través del pozo. En este caso, se inyecta agua a alta presión mezclada con arena y productos químicos para fracturar la roca y permitir que el gas fluya hacia el pozo.
Gasificación in situ: se utiliza en yacimientos de gas natural no convencional, como el gas de esquisto. En este caso, se inyecta vapor de agua y aire caliente en la formación geológica para calentarla y liberar el gas natural.
Extracción de gas licuado: se utiliza para el transporte del gas natural a largas distancias. En este proceso, se enfría el gas natural hasta que se convierte en líquido y se lo transporta en tanques especiales. Una vez llegado a su destino, se lo vuelve a calentar para que vuelva a su estado gaseoso y pueda ser utilizado.
Como hemos visto, el gas natural es una fuente de energía limpia y eficiente que se encuentra en diversos lugares del planeta. Su origen puede ser a partir de restos orgánicos de animales y plantas que se han acumulado en el subsuelo durante millones de años. Saber de dónde proviene el gas natural es importante para entender su proceso de extracción y producción, así como para valorar su papel en la transición hacia una economía más sostenible.
Esperamos haber sido de ayuda para resolver tus dudas sobre el origen del gas natural. ¡Gracias por leernos y hasta la próxima!